La sensualidad es una cualidad, facultad o habilidad capaz de provocar una reacción emocional en otra persona. Forma parte de nuestra personalidad y aunque algunos creen que es innata lo cierto es que se puede aprender.
Una práctica que comenzó con carácter espiritual hace miles de años y fue implementando posturas (asanas), tipos de respiración (pranayamas), contracciones específicas de partes del cuerpo (bandhas), gestos realizados generalmente con las manos a los que se atribuye un carácter sagrado (mudras), y meditaciones.